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Débil alerta Amber en Michoacán/ By Columnista Invitado

 Por Gladis López*

Desde su implementación en mayo de 2012, en México el programa Alerta Amber  ha encontrado a cientos de menores de edad y su operación en diferentes estados de la República Mexicana se ha llevado a cabo con resultados exitosos.

Alerta Amber es el mejor ejemplo de que diversas iniciativas y programas internacionales pueden ser adaptados al contexto mexicano con éxito, y es que el protocolo que se lleva a cabo para encontrar a niños, niñas y adolescentes extraviados también se implementa en países como Canadá, Inglaterra, Irlanda, Francia, Alemania, Holanda, Malasia, Grecia y naturalmente Estados Unidos, país donde surgió tras la desaparición de Amber Hagerman, una niña secuestrada y hallada muerta en calles aledañas a su casa en 1996.

México es el primero en Latinoamérica  y el décimo país del mundo en adaptar este protocolo, sin embargo, es hora de exigir que administraciones estatales se involucren en la aplicación de este programa de manera oficial, sobretodo ante la reciente denuncia de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, en la que asegura se registra un crecimiento alarmante de niños desaparecidos, quienes pudieron haber sido sustraídos de sus hogares o reclutados por organizaciones criminales.

Justo en esa tónica deben ponerse las pilas estados como Chihuahua, Guerrero y el estado de donde soy originaria, Michoacán, pues de acuerdo con el sitio de Alerta Amber, aún operan sin formalizar. Hace falta que estas entidades se unan oficialmente a los esquemas de colaboración entre instituciones y terminen de  una vez la instalación de un Comité Estatal del Programa Alerta Amber que se suscriba al Protocolo Estatal y trabaje de manera coordinada con la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) y otras instancias del gobierno local.

Diferente es el caso y un aplauso merecen Oaxaca y Chiapas, donde la activación ha concluido con resultados favorables  al implementar unidades de investigación especializada y ayuda psicológica, respectivamente.

Ante la exigencia de combatir y sancionar delitos que vulneren la seguridad de la niñez mexicana, el Gobierno Federal le ha echado todos los kilos a la adopción de este programa; la activación de la alerta mediante criterios estrictos y la cooperación entre dependencias y ciudadanos ayudarán a hacerla más eficaz.

Alerta Amber no es sólo un protocolo de activación para la búsqueda de menores desaparecidos, es un programa que llama a la colaboración entre estados, países e instituciones, es sólo un ladrillo en la construcción de una mejor sociedad para las futuras generaciones.

Este es un tema reflexivo que nos invita a pensar si como padres descuidamos a nuestros hijos y nos ayuda a hacer conciencia de que en cualquier descuido pueden estar en peligro.  Sin embargo, el tema más importante es el fomento de la solidaridad, valor que los mexicanos tomamos como estandarte.

Es tiempo de preguntarnos si esta característica de la que nos gusta hacer gala es verdad. Los invito a hacer la parte más sencilla de la activación de la Alerta Amber: compartir en Facebook y darle retweet a la foto de un niño desaparecido, sin duda un acto de ayuda que
puede cambiar el destino de un pequeño. Es mi opinión…

Licenciada en Economía por la UMSNH. Consejera Nacional y Estatal del PAN. Ex funcionaria pública. Orgullosa madre de familia.

columnachangoonga@gmail.com

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